Hay algo que nos diferencia de los otros seres en la Tierra, y es el uso del tiempo y del dinero. No siempre los usamos de manera consciente, pero sí sabemos que es algo de lo que nos gustaría tener más, ¿cierto?

Pero ¿Cómo? Pues utilizándolos mejor.

La “solución” que yo propongo es aprender las reglas básicas de decoración y conocer la paleta de colores que hace latir a tu corazón con más fuerza.

Para lo primero hay multitud de libros, aunque yo os recomiendo uno en concreto: “Siéntete a gusto en casa” de Kate Ramsted, lo podéis encontrar en Amazon.Este maravilloso libro contiene las reglas básicas de diseño interior para tu casa, explicadas de manera fácil y amena, con ilustraciones que acompañan los textos para mejor comprensión. Para mí, si entiendes lo que explica este libro, y lo aplicas a tu casa, tu bienestar en casa mejorará muchísimo.

Sobre el color también hay muchos libros disponibles. Pero si yo te tuviera que aconsejar algo sería: mira los colores con los que vas vestido habitualmente y empezarás a tener una idea de los colores que puedes poner en tu casa, ya que si te gusta en tu ropa, seguramente también te guste estar rodeado por ellos.

Aunque esto tiene una excepción: ¿Qué pasa si en tu armario sólo usas colores neutros ya sea porque no te atreves a usar más allá del blanco, negro, gris y beige o simplemente para facilitarte la vida? ¿Te pasa? ¿Eres consciente de ello? ¿Tú casa también está decorada con esos colores? ¿Te gustaría ponerle más color a tu vida pero no te atreves porque tienes miedo a equivocarte?

Hay una manera sencilla de saber si sólo te gustan los colores neutros, tanto para tu armario como para tu casa. Mirando más colores. Atrévete y siéntete libre de explorar otras opciones a parte de los que estás acostumbrado a relacionarte. Sal de tu zona de confort.

¿Dónde puedes buscar inspiración? Si miras a tu alrededor, el mundo está lleno de color, la naturaleza por ejemplo es una fuente inagotable de inspiración para muchos artistas y diseñadores. Mires el paisaje que mires, hay paletas cromáticas preciosas.

Al diseñar un proyecto, me gusta inspirarme en la paleta cromática de la naturaleza que rodea la casa que estamos diseñando. Integro y fusiono el exterior con el interior y los combino con los colores que les gustan a las personas que van a vivir en el espacio.

Pero ¿Qué pasa si vives en la ciudad? Pues que igualmente puedes utilizar los colores de la zona en donde vives. ¿Hay montañas o mar cerca? ¿Dónde te gusta estar más?

Otra fuente de inspiración para sacar tu paleta cromática son las obras de arte. ¿Tienes alguna pieza que te encante? Si la tienes, observa cómo el artista combinó los colores de manera armónica.

¿Te siguen gustando sólo los colores neutros? ¿O te llaman la atención otros pero no te atreves a introducirlos en tu vida?

Hay muchas maneras de utilizar el color: desde pequeños detalles decorativos, como cojines, piezas de arte y objetos pequeños; hasta lo más atrevido y maximalista: paredes y techos de colores intensos, combinados con telas, alfombras y objetos decorativos llenos de color que forman una paleta maravillosa.

Para mi lo que te va a indicar por dónde ir, tanto para tu paleta como para la decoración de tu casa, es lo que sientes. Tu brújula interna es tu corazón y lo que le hace latir con fuerza. Si lo escuchas, le haces caso y utilizas tu mente para llevar a cabo lo que te pide, seguramente encuentres lo que te guste y necesites para vivir mejor.

Te digo esto porque a mi por ejemplo, me encanta y me inspira mucho el mar pero he descubierto que los azules no me aportan energía. A mi corazón la paleta de colores que le hace latir con fuerza es la de los colores tierra: verde, amarillo curry y arcilla. Ahora estoy rodeada de ellos y sus variantes, tanto en mi casa, como en mi ropa y no me canso de vivirlos a diario. Antes de tenerlos definidos, tuve en mi casa y en mi ropa varios tonos de azul hasta que descubrí que cuando los usaba no saltaba de alegría, que a mi corazón no le hacían latir con fuerza, era más bien un “Ok, es bonito, pero no me hace brillar los ojos mientras sonrío”. Me hubiese ahorrado mucho tiempo y dinero si hubiese sabido las señales de mi corazón y mis colores cuando empecé a decorar mis casas.

Y por qué te he explicado todo esto te preguntarás. Pues porque cuando tienes claro cómo utilizar tu casa de manera eficaz y los colores para estar rodeado de los que te encantan y te llenan de energía, vives y disfrutas tu casa con más facilidad. Decoras de manera más fácil, porque sabes lo que te gusta y tienes claro lo que necesitas. Eso te hace tomar decisiones más adecuadas y te sientes más seguro al tomarlas. Además, como has aprendido a escuchar a tu brújula interior, a tu corazón, eres más consciente de lo que quieres en otros aspectos de la vida y, cómo te has demostrado a ti mismo que tomas buenas decisiones en tu casa, te sientes seguro para tomar otro tipo de decisiones en otras áreas de tu vida por lo que ahorras tiempo y dinero.